domingo, 25 de enero de 2009

Mi Abuela está muerta..


Pasó hace una semana; había salido de la clínica, si bien seguía algo delicada. Una mañana, luego de arreglarse dijo: Pasenme mi anillo, que me voy con mi esposo... y expiró.

La sensación de tristeza y pérdida son las habituales, relacionadas mas que todo con los lazos de afecto que caen al vacío luego de que la persona hacia la cual estaban dirigidos desaparece. No hay queja posible: 91a son más que suficientes y su vida, aunque llena de privaciones y muy dura a ratos acabó muy bien en el país que la acogió luego de huir de una España tan desesperadamente pobre que creo que pocos españoles de ahora la creen posible.

Claro que siempre una muerte de alguien querido prefigura la propia. Moriré sin duda y no importa si iré a algún lugar después o solo se perderá la información almacenada en mis sinapsis luego de su degradación definitiva; lo que queda es lo que haces.

Llámalo karma o legado, es lo que haces en la vida lo que queda. La impronta en los cercanos a ti, los objetos relacionados con tu persona, tu marca personal en la historia grande o pequeña.

Desde luego eso no es importante para ti, si estas muerto. Pero debe ser consolador, conforme la hora se acerca.

Espero una buena muerte, y que mi vida valga la pena.

1 comentario:

JAVIER AKERMAN dijo...

Apreciado amigo:
Te acompaño en este triste momento con todo mi corazón. Tu abuela ha tenido una muerte digna, sin sufrimiento. Eso se traduce como un "buen karma". Mis oraciones por ella y mi apoyo sincero para ti.
Un fuerte abrazo.